Cómo empezó todo:
El principio de esta historia se remonta muchos años atrás, pero para no hacer el cuento tan largo, basta con decir que a través de experiencias personales de rechazo y convivencia en nuestra adolescencia y años universitarios el Espíritu santo puso en nuestros corazones un profundo deseo de formar una comunidad donde "todos se sintieran bienvenidos y amados". Además, por el 2018 que MariFer regresó a México, empezamos a soñar con la idea de abrir nuestro hogar y compartir los recursos de evangelización y formación que habíamos conocido en Canadá y los Estados Unidos. Pasó el tiempo, inició la pandemia y entonces pasamos los estudios de fe de CCO que estábamos dirigiendo en línea. Además, abrimos otros grupos y, al ver la gran necesidad de Dios en las personas, nos pusimos las pilas para compartir otras herramientas. Fue ahí cuando vimos la necesidad de unificar nuestros esfuerzos de evangelización bajo un solo nombre. Al principio escogimos "CW Ministries" y un logo que representaba nuestros símbolos de fe: un velero y una estrella. Sin embargo, no queríamos limitar nuestro alcance por el nombre en inglés (o en español), ni que el significado de ese nombre fuera simplemente nuestros apellidos, entonces buscamos palabras en latín que comunicaran lo que queríamos lograr con este apostolado y fue así que eventualmente dimos con "Casae Verbum Vehit Ministerium" (Dato curioso, el verbo "vehit" significa "llevar en velero").
La confirmación del Espíritu Santo de que íbamos por buen camino nos llegó un poco después, mientras seguíamos la primera peregrinación virtual en Jerusalén de Magdala* descubrimos que en la Iglesia de las Bienaventuranzas hay unos mosaicos en el suelo que retratan las virtudes teologales y la representación de la virtud de la esperanza es, justamente, un velero con una estrella. Cuando vimos esta imagen nos conmovimos mucho, porque se sintió como una respuesta del Señor a los gritos de corazón y las dudas que teníamos sobre nuestra vida en esos momentos.
Imagen de la esperanza en la Iglesia de las Bienaventuranzas en Israel.
Imagen de la esperanza en la Iglesia de las Bienaventuranzas en Israel.
A partir de entonces, CWM ha ido creciendo y solidificándose gracias a Nuestro Señor y a los miembros que han ido llegando. Muchas veces decimos que este apostolado "tiene vida propia", porque Tesi y yo (MariFer) realmente sentimos que hemos hecho muy poco por lograr que el sueño que teníamos se hiciera realidad pero, antes de que nos diéramos cuenta, esa visión de nuestra casa llena de gente alegre que se siente bienvenida y acogida se hizo realidad.